El sector eólico reclama una nueva regulación para “no tirar por la borda” los éxitos logrados

- “ Cada euro de prima a la energía eólica ahorra dos euros de importación de combustibles fósiles”

MADRID
SERVIMEDIA

El presidente de la Asociación Empresarial Eólica (AEE), José Donoso, pidió hoy al Gobierno que apruebe “cuanto antes” un nuevo marco regulatorio del sector para “no tirar por la borda un esfuerzo de la sociedad española que acabó en éxito” y lograr que “la eólica siga siendo uno de los mejores negocios de la economía española”.

En el acto de presentación del “Estudio Macroeconómico del Sector Eólico en España”, el presidente de esta asociación denunció que, en los últimos meses, desde la puesta en marcha de la normativa aprobada en mayo, la estabilidad que permitió el auge de la industria eólica “se ha visto afectada”.

Desde entonces, según Donoso, “ha habido que paralizar prácticamente la producción de los aerogeneradores y los stocks se han ido acumulando en las fábricas”. De hecho, “hoy en Europa se cree que España ya no da una imagen de garantía institucional; debemos recuperarla”.

De ahí la necesidad de un nuevo marco regulatorio que dé la seguridad suficiente para acometer las inversiones precisas. “Nuestro deseo es seguir” como hasta ahora, con un crecimiento “ordenado y estable”, a una media de 2.100 megavatios (MW) al año.

Por ello, “necesitamos cuanto antes esa legislación y que se dé salida a los stocks. Hay que recuperar estos seis meses de trabajo perdido”, dijo.

El Gobierno, a su juicio, ha hecho “un gran esfuerzo a favor de las renovables pero, sin embargo, la eólica ha salido perdiendo”. “Esperamos que nadie tenga la tentación de pensar que el problema está resuelto”, agregó.

SEGURIDAD JURÍDICA

Por su parte, el director general de Política Energética y Minas, Antonio Hernández, también presente en el acto, sostuvo que el Gobierno “seguirá apoyando al sector de las renovables”, más aún en la próxima Presidencia Española de la UE, pero de tal modo que “la prima se ajuste a las curvas de aprendizaje” de las distintas tecnologías, para “buscar seguridad jurídica”.

“La regulación ha de tener en cuenta que estas tecnologías aún son caras, mientras no alcancen su madurez tecnológica”, si bien reconoció que la eólica es la que ha tenido una evolución más positiva.

Aludió también a que el desarrollo de las renovables “viene ligado a las energías térmicas”, como el carbón y los ciclos combinados, para garantizar la seguridad de suministro.

Hernández defendió la conveniencia de la normativa aprobada en mayo por el Ejecutivo para las renovables que, a su entender, aporta dos ventajas: la citada seguridad jurídica y mayor eficiencia, al reducir las primas en función de la oferta del sector.

Admitió que, por motivos técnicos y económicos, “se ha tenido que recurrir a la laminación temporal; había que buscar un criterio para decidir qué proyectos entrarían antes” en el registro, para poder cobrar las ayudas, “y cuáles después”. “El criterio de la autorización administrativa es transparente y objetivo”, añadió.

A este respecto, apuntó que, hasta ahora, “casi 90 proyectos ya han sido aprobados”, en concreto, aquellos en disposición de verter energía a la red. “Esperamos sacar los siguientes en los próximos días”, dijo.

PRIMAS Y AHORROS

Por otro lado, Donoso presentó los datos del sector correspondientes al ejercicio 2008, un año en el que se instalaron 16.740 megavatios (MW), se generaron 31.300 gigavatios/hora (GWh) y se cubrió el 11,5% de la demanda. Además, en 2008 la energía eólica evitó la emisión de 19 millones de toneladas de CO2.

Este sector recibió primas por valor de 1.138 millones de euros y evitaron la importación de 2.200 millones de euros de combustibles fósiles. De este modo, dijo Donoso, “por cada euro de prima a la eólica se ahorran dos euros de importación de combustibles fósiles”. Así, “hacemos una contribución muy importante a que nuestra balanza comercial sea más sostenible”, con unas exportaciones que ascendieron a 2.900 millones de euros (1.00 millones más que sectores tradicionalmente exportadores, como el del vino).

Por otro lado, esta industria generó 41.000 puestos de trabajo y su efecto sobre el PIB fue de casi 4.000 millones euros (2.311 de forma directa y 1.492 de forma indirecta). Todo ello, según la AEE, hace necesario plantearse si, realmente, la eólica es una energía cara.

Finalmente, quiso recordar que “no sólo depende de nosotros” que la eólica sea competitiva, sino que tienen gran incidencia los precios del pool.

(SERVIMEDIA)
25 Nov 2009
CCB/pai