Tarquis se refería así a la falta de vocaciones sacerdotales a las que aludió ayer el presidente de la Conferencia Episcopal Española, Antonio María Rouco Varela, en la inauguración de la 94 Asamblea Plenaria.

"Una persona que tiene vocación de formar una familia es obligada a estar célibe y creo que esto es una carga muy grande y muy difícil de llevar y un handicap para las vocaciones", sentenció Tarquis.

El portavoz de la Alianza Evangélica Española concluyó que si la jerarquía católica permitiera el celibato voluntario, y más ahora que incluirá en su seno a sacerdotes evangélicos casados, podría superar esta crisis de vocaciones.