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Cataluña. El Gobierno minimiza la declaración del Parlamento porque "no tiene efectos jurídicos"

- Margallo dice que tampoco tiene "consecuencias prácticas inmediatas"

MADRID
SERVIMEDIA

El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo, minimizó este miércoles la declaración de independencia aprobada por el Parlamento de Cataluña, al entender que "no tiene efectos jurídicos ni consecuencias prácticas inmediatas".

García-Margallo hizo estas declaraciones en una rueda de prensa en el Ministerio junto a su homólogo alemán, Guido Westerwelle, con quien mantuvo un encuentro bilateral para repasar los intereses internacionales de ambos países, en los que prestaron especial atención a los conflictos en Siria, Libia, el Sagel y Mali.

Preguntado sobre la iniciativa del Parlamento de Cataluña, Margallo señaló que considera "extraordinariamente difícil" que el Ejecutivo español pueda recurrir al Tribunal Constitucional la resolución aprobada por el Parlamento de Cataluña.

"No tengo una opinion definitiva pero he pensado en el tema porque me preocupa", dijo. "Es una declaración retórica que tiene que plasmarse en acciones jurídicas, que esas sí serían recurribles".

Margallo afirmó que tanto para Cataluña como para España "sería una pésima noticia" que una de las principales comunidades autónomas del país decidiera independizarse e hizo un llamamiento para "no abrir brechas insalvables" y resolver las diferencias con el mismo espíritu de consenso que en la Transición.

El ministro advirtió en nombre del gabinete de Mariano Rajoy que el Gobierno "no permitirá nunca una consulta que no se ajuste a todos los principios de legalidad".

Desde el punto de vista del contenido de la declaración aprobada por el Parlamento de Cataluña, Margallo indicó que el texto "saca conclusiones erróneas" porque trata a la comunidad como un territorio soberano y otorga a los ciudadanos catalanes una capacidad de decisión que no les corresponde.

Margallo se amparó en los artículos 1 y 2 de la Constitución española de 1978 para subrayar que España es "indisoluble" y que cualquier decisión soberana le corresponde a todo el conjunto de la ciudadanía, no a una sola de sus partes.

Además, avisó que una declaración de independencia como la que está promoviendo Cataluña sería "unilateral" y, por lo tanto, conllevaría la automática expulsión de la Unión Europea sin posibilidad de reintegrarse salvo que haya acuerdo unánime de todos los miembros.

"Ni es verdad que haya una soberanía de cada uno de los territorios que forman España, porque la soberania corresponde al pueblo español, ni es posible una salida de Cataluña que no acarreara la automática salida de la UE y un periodo de incertidumbre que en mi opinión no se acabaría nunca y crea un perjucio social que es lo peor que se puede hacer en un momento de crisis", resumió a modo de conclusión.

(SERVIMEDIA)
23 Ene 2013
PAI/gja