"No ha renunciado nadie y tengo buena información", aseguró el consejero mientras un grupo de mujeres de la Federación de Enfermedades Raras gritaban a las puertas del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad consignas contra la privatización de la sanidad pública y tildaban a Lasquetty de "mentiroso".

"La tarea de los directivos es asumir su responsabilidad y en estos momentos la responsabilidad es arrimar el hombro para entre todos conseguir que con los menos recursos que tenemos podamos seguir teniendo un sistema sanitario público de la máxima calidad", concluyó el consejero madrileño.