La delegada compareció ante los medios de comunicación tras mantener una reunión con la directora del Instituto de la Mujer del Ministerio de Igualdad, Rosa Peris, distintas asociaciones de mujeres y responsables de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado en Madrid.

En dicho encuentro, las asociaciones de mujeres han conocido la organización y funciones de la Unidad de Coordinación contra la Violencia sobre las Mujeres de la Delegación del Gobierno y el balance de resultados de las actuaciones realizadas en la Comunidad de Madrid en esta materia.

Un total de cuatro mujeres resultaron muertas en los primeros 10 meses de 2009, frente a las 11 que fallecieron en el mismo periodo del año anterior, lo que supone un descenso del 63,6%. Ninguna de las cuatro mujeres fallecidas en 2009 tenía orden de protección y el 50% de ellas era de nacionalidad extranjera.

UN 4,3% MÁS DE DENUNCIAS

En cuanto a las denuncias por malos tratos, se han incrementado un 4,35% respecto al año anterior, pasando de 7.508 a 7.850, mientras que el número de órdenes de protección concedidas en 2009 baja un 4,6% en relación a 2008, pasando de 2.307 en los dos primeros trimestres de 2008 a 2.202 en el mismo periodo de 2009. En Madrid hay actualmente 12.286 mujeres con medidas de protección.

La UPAP (Unidad de Prevención, Asistencia y Protección contra los Malos Tratos) se encarga de los seguimientos a las víctimas con medidas judiciales de protección y les ofrece mediante el servicio de teleasistencia móvil una atención inmediata y a distancia, asegurando una respuesta rápida las 24 horas del día, los 365 días del año. 541 mujeres son usuarias de la teleasistencia UPAP y 191 maltratadores llevan instalados brazaletes.

Valcarce quiso transmitir un mensaje de confianza a los ciudadanos y subrayó que el descenso de víctimas mortales por violencia de género demuestra que "estamos ganando la batalla" contra esa lacra.

Al acto asistió Jorge Vicente Sánchez Blanco, acompañado de su familia, el joven que resultó apuñalado la semana pasada al intentar socorrer a una mujer que presuntamente estaba siendo maltratada por su compañero sentimental. En el transcurso del acto se le entregó una placa en reconocimiento a "su actuación valiente y heroica".