Según informó este jueves la citada federación, el objetivo de esta plataforma será hacer frente a las consecuencias que la reforma del sistema sanitario madrileño acarreará para los ciudadanos con discapacidad, necesitados de la universalidad y gratuidad de la sanidad pública, "debido a sus estándares de vida por tener una discapacidad".

Las entidades que forman parte de la federación han puesto de manifiesto la "incertidumbre" que las medidas anunciadas por el Ejecutivo regional generan en las personas a las que representan, además de su oposición a determinados planteamientos del plan de medidas de garantía de la sostenibilidad del sistema sanitario público de la Comunidad de Madrid.

Estas mismas entidades han expresado su "estupor" ante la inexistencia de una memoria económica en el mencionado plan, que respalde las medidas incluidas en él.

Y es que, sostienen, esta memoria económica es "esencial", en tanto que las decisiones adoptadas en el plan tienen bases "meramente monetarias y de eficiencia", justificándose el Gobierno en la necesidad de acometerlas para evitar el colapso del sistema.

Por otra parte, Famma-Cocemfe Madrid entiende que si el problema de la sanidad pública de la región está en la gestión, como parece que piensan los defensores de su privatización, la solución vendrá del cambio de los gestores, que no tienen que ser necesariamente privados, y que "en la mayoría de los casos han sido colocados por el consejero de turno" sin pruebas ni exámenes previos.

Ante esta situación, la federación quiere mantener una reunión "urgente" con los responsables de la Consejería de Sanidad para que pueda escuchar al sector y consensuar alternativas al futuro plan, "que no hará otra cosa que poner en peligro vidas humanas y propiciar un retroceso en la calidad de vida de las personas con discapacidad".