Además, HRW recomendó a Marruecos que la expulsión de Haidar y permita a esta defensora de los derechos humanos que entre "en su país de nacionalidad".

Esta organización recordó que el artículo 12 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos (Pidcp), ratificado por Marruecos, señala que "toda persona tendrá derecho a salir libremente de cualquier país, incluso del propio (...). Nadie podrá ser arbitrariamente privado del derecho a entrar en su propio país".

HRW consideró que España "comparte responsabilidad" con Marruecos en la situación de Haidar porque permitió que se bajara del avión en Lanzarote "a pesar de que llegó contra su voluntad y no llevaba pasaporte".

"Dado que las autoridades españolas son conscientes de la forma arbitraria que Marruecos confiscó los documentos a Haidar y la expulsó, España debe permitir ejercer su voluntad manifiesta de coger un vuelo a El Aaiún y ejercer sus derechos en virtud del artículo 12 del Pidcp", apostilló.

Por otro lado, HRW señaló que la situación de Haidar, expulsada de Marruecos por poner Sáhara Occidental como lugar de residencia en un control aeroportuario, "llega en un momento de creciente represión por parte de Marruecos al activismo pacífico de los defensores de la libre determinación del Sáhara Occidental".

La directora de HRW en Oriente Medio y Norte de África, Sarah Leah Whitson, afirmó que "Marruecos no puede deportar a sus propios ciudadanos por la forma en que rellenan formularios para entrar en el aeropuerto. Debe dejar que Haidar regrese a casa y dejar de acosarla por su defensa pacífica de la autodeterminación de los saharauis".