Borra aseguró a los periodistas tras su entrevista con el presidente de la Cámara, que los funcionarios atraviesan un período de graves dificultades y mantienen su preocupación por la privatización de los servicios públicos, por la pérdida continuada de poder adquistivo y por la reducción del empleo público.

Por todo ello, consideran más necesario que nunca "promover un pacto de Estado entre los principales partidos que dignifique el empleo, elimine duplicidades e ineficiencias y al mismo tiempo permita preservar la calidad de los servicios que reciben los ciudadanos".

El portavoz del sindicato más representativo en las Administraciones Públicas, transmitió todas estas inquietudes a Posada, en quien encontró una actitud "receptiva" y el comprimiso de intentar "que los partidos lleguen a acuerdos" desde su puesto institucional.

Según Borra el fin de la crisis pasa por la creación de un "modelo social en el que se acabe con el derroche irresponsable de recursos públicos y con una administración excesivamente politizada en el peor sentido de la palabra".

Para empezar, el sindicato reclama de los poderes públicos que reconozcan el trabajo de los empleados públicos y el sacrificio que les está imponiendo la crisis.