En su primera comparecencia pública en Sabin Etxea, sede del PNV, tras confirmar su victoria electoral, Urkullu habló de “acuerdos” y de su compromiso personal desde este lunes para propiciarlo. “Este país no va a construirse unos contra otros, desde la división y la exclusión”, aseveró.

Destacó el que hayan sido las primeras elecciones sin la violencia de ETA y con “la participación de todas las sensibilidades políticas” en una Euskadi “plural”, circunstancia que reiteró en varias ocasiones.

Exigió “acuerdo amplios, plurales y permanentes” contra “una situación de crisis y de paro”, al tiempo que destacó la necesidad de “construir la paz”, pero en ningún caso desde el “enfrentamiento y la exclusión”.

Por ello, agregó, el futuro de Euskadi “exige colaborar con los partidos y las instituciones y todos los agentes políticos y sociales” para enfrentar una crisis económica, “pero también política”, evitando generar “inestabilidad y desconfianza”.