De acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), esta cifra implica que uno de cada ocho ciudadanos de todo el mundo pasa hambre, cuando el planeta produce alimentos suficienntes para evitarlo. “Si la tendencia actual persiste , el Objetivo de Desarrollo del Milenio relativo a la lucha contra la malnutrición se verá incumplido”, advirtió.

La misma idea expresó Manos Unidas, que aunque reconoce que en los últimos años se ha conseguido sacar del hambre a 130 millones de personas, alerta de que aún queda mucho por hacer.

En este sentido, Acción contra el Hambre subraya que cada día unos 10.000 niños mueren por desnutrición aguda, cuando un tratamiento de solo 40 euros puede salvarles la vida.

QUÉ HACER

De ahí el llamamiento de la campaña 'Derecho a la Alimentación, Urgente!', que exige a la comunidad internacional políticas decididas contra el hambre, esto es, “atacar las causas estructurales” del problema. Pide acabar con la especulación en los precios de materias primas y con el acaparamiento de tierras; el cese de las políticas de fomento de los agrocombustibles, que suponen una grave competencia a la hora de destinar tierras para el cultivo de alimentos, y un impulso decidido a la lucha contra el cambio climático, que tanto afecta a la agricultura y la ganadería.

También defiende un desarrollo agrícola sostenible, que tenga en cuenta a las comunidades campesinas y prime el consumo de productos locales. Finalmente, reclama al Gobierno de España mantener los recursos contra el hambre procedentes de la Ayuda al Desarrollo, e invita a la ciudadanía a unirse a esta lucha con sus “pequeñas decisiones de cada día”.