Así, la empresa norteamericana utilizará su tecnología patentada ‘Chromovert’ para rastrear y detectar ingredientes que proporcionen sabores similares al de la sal, y que conduzcan al descubrimiento de nuevos sabores.

La colaboración entre ambas empresas se desarrollará durante los tres próximos años, y se suma al trabajo que se esta llevando a cabo para reducir el contenido en sal de sus productos a escala global, ya sea adaptando los productos existentes o introduciendo otros nuevos.

La multinacional suíza ha invertido 15 millones de dólares en esta investigación que está en línea con el objetivo de mejora continua del perfil nutricional de sus productos a nivel internacional, habiendo reducido durante la última década en más de 12.000 toneladas el contenido de sal de sproductos alimenticios a escala global.