Fuentes de la consejería aseguraron a Servimedia que el cambio de nombre, regulado en el decreto que el Consejo de Gobierno aprobó la pasada semana por el que se modifican parcialmente las competencias y estructura orgánica de algunas Consejerías de la Comunidad de Madrid, forma parte de una reestructuración que permitirá optimar recursos y mejorar la gestión sin menoscabo de los servicios.

El organismo, que pasa a denominarse Instituto Madrileño de la

Familia y el Menor, asume las competencias de la Dirección General de la Familia. Las mismas fuentes indicaron que la reestructuración orgánica aumentará la eficiencia y no implicará un aumento del gasto, sino lo contrario.

En este sentido, negaron las afirmaciones de UGT, que aseguró que esta modificación generará más gastos.