Gallardón se refirió a este asunto en la inauguración de la edición de este año de la feria informática SIMO, que esta edición dedica una atención especial a la Justicia. En este acto de apertura estuvieron también presentes el presidente del CGPJ y del Tribunal Supremo, Gonzalo Moliner, y el fiscal general del Estado, Eduardo Torres-Dulce.

El ministro se refirió a que hay que hacer de la tecnología “un instrumento verdaderamente eficaz que mejore la eficacia y la actividad de una Justicia cada vez más cercana a sus destinatarios”.

En este sentido, señaló que “tenemos en España lo más importante para garantizar la tutela judicial efectiva, que son los titulares del Poder Judicial: los jueces y magistrados que en toda España imparten justicia, juzgan y hacen ejecutar lo juzgado”.

Por este motivo, añadió que “la obligación de todas las Administraciones públicas es poner a disposición de jueces y magistrados, así como de los miembros de la carrera fiscal los medios materiales adecuados para conseguir ese objetivo”.

COMPATIBILIDAD DE SISTEMAS

Destacó que proporcionar los medios necesarios pasa por “la implantación de las nuevas tecnologías como el lenguaje exclusivo en la tramitación de todos los procedimientos”.

A este respecto, se refirió a que se trabaja en una “plataforma informática que garantice la interoperabilidad y la compatibilidad” de los ocho sistemas de gestión procesal que actualmente funcionan en España. También apuntó a la necesidad de impulsar una Oficina Judicial “insuficientemente desarrollada” y por la consolidación del expediente judicial electrónico.

Por su parte, Moliner aludió también a la importancia de la compatibilidad de los sistemas de gestión procesal. Asimismo, destacó que la informatización de los tribunales pasa por el “punto neutro judicial”; el “sistema de gestión gubernativa”; y el “centro de documentación judicial”.

A su vez, Torres-Dulce destacó la importancia de la informatización para que la Fiscalía pueda asumir un mayor papel en la instrucción de los sumarios, algo para lo que “imperiosamente” se necesitan los adecuados medios técnicos.