En declaraciones a Servimedia, Zabaleta aseguró que la postura del preso es la “antagónica” a la del Partido Popular, que se niega, dijo, a “dialogar”, no da “ningún paso” y acata las directrices de la “caverna más retrógrada”.

Aralar, antigua escisión de Batasuna y ahora integrada en la coalición EH Bildu, ve el paso como “muy positivo” y como una “aportación muy importante”, junto a la “la consideración de todas las víctimas de la violencia como personas que han de ser respetadas, a las que se les debe la verdad, la memoria y el reconocimiento”, indicó.

Las palabras de Otegi, según Zabaleta, contribuyen a “la pacificación y normalización política” no sólo en Euskadi, sino “en todo el Estado” y son a su vez un avance para la organización política que el preso representa, la antigua Batasuna o la actual Sortu.

El líder de Aralar considera que las palabras de Otegi no tienen un “sentido electoralista” ni buscan beneficiar a la formación, si bien apuntó que “estamos en posibilidad de ser la primera fuerza”.