Basagoiti sostiene en el documento, recogido por Servimedia, que la cita con las urnas del próximo 21 de octubre debe servir para consolidar "los avances logrados" en los últimos años y "garantizar los pasos firmes hacia la convivencia que mayoritariamente hemos apoyado" los vascos.

A su juicio, es necesario que PP, PSE y PNV se comprometan a cumplir una serie de principios básicos que permitan "consolidar de manera definitiva una convivencia en paz y en libertad en Euskadi", especialmente ante la inevitable regreso de los representantes políticos de la izquierda abertzale al Parlamento de Vitoria.

Basagoiti pide "blindar" cinco principios esenciales para la convivencia en el País Vasco. El primero de ellos es "garantizar que todos los ciudadanos puedan expresar sus opiniones democráticas con plena libertad", al entender que "Euskadi debe ser un espacio libre de amenazas y libre de extorsión".

Además, reclama que "ninguna pretensión política puede pasar por encima de la pluralidad que representamos los vascos". "Somos diferentes y esa diferencia tiene que convivir en paz y en libertad. No caben proyectos que aspiran a imponer y uniformizar".

El líder de los populares vascos argumenta que "en Euskadi cabemos todos, cuantos estamos y cuantos lleguen a estar, y estén dispuestos a convivir en democracia, respetando los derechos, las normas, y las libertades de todas y cada una de las personas".

"Es imprescindible la crítica del terrorismo de ETA, el reconocimiento del daño causado y la ausencia de cualquier tipo de justificación de su trayectoria criminal, para poder tener relaciones políticas normalizadas entre quienes aspiramos a representar a los ciudadanos y solo a los ciudadanos", proclama en el cuarto punto.

Por último, establece como un principio irrenunciable para la convivencia que los distintos partidos políticos pueden "aspirar a cambiar las leyes, pero hay obligación de cumplirlas, en prestigio de la democracia y sus valores".

Basagoiti sustenta esta propuesta en que "Euskadi crece en la normalidad y el entendimiento, y se debilita en el enfrentamiento y la división". Por eso, emplaza a López y Urkullu a adquirir los tres juntos este "compromiso" para seguir impulsando "un País Vasco basado en la convivencia y el respeto".

"Los partidos políticos democráticos debemos ser capaces de apartar nuestras legítimas discrepancias ideológicas y electorales para fortalecer las posiciones democráticas, que han permitido acabar con los ataques de ETA y que, desde la exigencia democrática, traerán consigo su disolución incondicional", dice.

El presidente del PP vasco cree que "Euskadi no se puede permitir ninguna involución como la que pretenden quienes no han sido capaces de hacer autocrítica del respaldo prestado a la eliminación del adversario ideológico, y aún siguen pretendiendo obtener un rédito político por el hecho de haber asesinado o aplaudido el terrorismo".