Aznar ha lanzado un duro ataque al PSOE por el "espectáculo" que ha dado tras las elecciones del 25 de mayo y ha dicho a los madrileños que reflexionen sobre el hecho de que Esperanza Aguirre no es hoy presidenta de la Comunidad de Madrid porque no quiso "aprovecharse" de los tránsfugas socialistas Eduardo Tamayo y María Teresa Sáez.

"Eso también es seriedady coherencia política. Esas son las diferencias entre partidos serios y no serios, entre partidos fiables y los que no lo son. Está claro que ni el PSOE es una organización fiable, ni su dirección actual, ni su candidato en Madrid son personas serias en quien se pueda confiar".

A su juicio, los socialistas "deberían decir si el 26 de octubre van a hacer una coalición estable con los comunistas de IU. Si es así, deberían tener el coraje de hacer un candidatura única y decir cuánto poder se estáN dispuetoS a dar a los comunistas. Y si no les dice nada, (deberían decir) que los mismos comunistas de IU han impedido cumplir la sentencia del Tribunal Supremo (que disuelve el grupo Socialistas Abertzaleak) y que son los que hasta ayer han estado a favor de que se hayan dado subvenciones al brazo político de ETA".

Aznar ha insistido en que a lo largo de los últimos meses el PP ha sido "gravemente injuriado" con una supuesta trama inmobiliaria para impedir que los socialistas gobernaran. "Han intentado traladar lo que eran problemas estrictamente suyos. Yo me acuerdo cuando se decía que era lo más grave desde el 23-F. Que se anunciaban tramas que hacían temblar, revelaciones indiscutibles que iban a dejar al país sentado, hechos rotundos e incontrovertibles. Al final, nada de nada, de nada, de nada. Al final, lo único que ha habido es un bochorno vergonzoso, especialmente para aquellos que han demostrado su absoluta incapacidad para dirigir el país".

Aznar se ha puesto en la tesitura de que los socialitas tuvieran opción de gobernar el 26 de octubre y ha pedido a los madrileños que piensen "en manos de quién estarían dejando miles de millones de euros" de presupuesto. "Ese mismo partido", prosiguió, "que da el espectáculo en Madrid, lo ha hecho en Navarra pactando alcaldías con nacionalistas, en Marbella con la moción de censura, y que ahora pide una reforma del Senado en su documento de política autonómica".

El presidente del Gobierno ha vuelto a oponerse a esa reforma constitucional del Senado poque la Cámara Alta "no es una cámara de disgragación de 17 soberanías, sino que representa la soberanía del pueblo español", recordando el papel jugado por el Senado en los últimos años en los que ha contado, citó, con presidentes como Esperanza Aguirre.