Extremadura puso junto a Castilla y León la nota discordante de los territorios gobernados por el PP en el último Consejo de Política Fiscal y Financiera. No llevaron la contraria al ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, pero se abstuvieron a la hora de votar. Pedían que al igual que el Estado ha conseguido por parte de Bruselas una ampliación de un año para cumplir con el objetivo de déficit, esta prórroga se aplicase también a las comunidades autónomas.

Monago sentenció hoy que “se acordó lo que se acordó y nosotros vamos a cumplir con ese criterio”. El dirigente popular enfatizó que “las cuentas de Extremadura están cumpliendo el objetivo que se marcó para este año del 1,5%”, y eso a pesar de que es la segunda comunidad con el déficit más alto de todo el Estado.

En línea con uno de los objetivos de la reunión, que salga de ella un mensaje de unidad en el seno del Partido Popular, el dirigente extremeño indicó que “no es momento de hablar de ¿qué hay de lo mío?, ahora toca hablar de lo que nos une a todos”.

Minutos antes de su llegada, un numeroso grupo de funcionarios entonaban lemas de protesta y volvían a cortar el tráfico en la calle Génova, frente a la sede nacional del PP, donde tenía lugar el encuentro. Un fuerte dispositivo policial obligó a los manifestantes a irse retirando hacia la acera. Frente a la barrera humana formada por los agentes, los trabajadores públicos gritaban “¡Que el próximo parado sea Mariano!”.