Tal y como explicó hoy en declaraciones a la prensa la consejera de Familia y Asuntos Sociales de la comunidad, Engracia Hidalgo, hace un año que se puso en marcha este proyecto pionero para evitar el abandono de los bebés.

Hidalgo explicó que el Gobierno regional puso en marcha esta iniciativa ya que “se venían produciendo anualmente de dos a tres abandonos de niños, y pensamos que era imprescindible tomar algún tipo de medidas que pudieran arreglar ese problema”.

“Asi que, junto con la Fiscalía, el defensor del menor y el Tribunal Superior de Justicia hicimos un protocolo, de tal forma que una mujer que se encuentre en una situación en la que se vea forzada al abandono del bebé, pueda llamar durante las 24 horas del día a un teléfono (112 ó 012) y un servicio de emergencia fuera a recoger al niño donde ella dijera, donde quisiera o donde estuviera”, explicó la consejera.

Con esta medida, agregó, “se garantizaba la protección del niño, no poner en peligro la vida del niño, que la madre no cometiera un delito (el de abandono) y el guardar la identidad de la madre encriptando los datos de tal manera que sólo pudieran tener acceso a ella los jueces”, continuó.

Este protocolo, que ahora cumple un año, ha prestado ya servicio a cinco niños. De ellos, tres están ya en adopción y los otros dos viven con familia extensa.