Según explica Leonisa, el probador toma las medidas básicas de la mujer –altura, pecho, hombros y cadera– a través de una cámara que proyecta la imagen en una pantalla y ofrece a cada usuaria su talla.

Con un movimiento del brazo, cada mujer puede elegir en la pantalla cualquiera de los 16 modelos disponibles –atrevidos, discretos, modernos, coloristas…– y ver cómo encaja con su personalidad y estado anímico.

Hasta el momento, más de 1.000 mujeres han utilizado ya el probador virtual instalado en Atocha y varios miles de ellas han pedido más información, lo que demuestra, según Leonisa, el interés femenino por un sector en constante crecimiento a pesar de la crisis.

Esta experiencia interactiva, que se desarrolla por primera vez en España, se mantendrá operativa hasta finales de julio.