Descubren el segundo magnetar anómalo del universo
El texto se ha copiado correctamente en el portapapeles
Un proyecto liderado por la investigadora del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) Nanda Rea ha descubierto el segundo magnetar anómalo del universo. Los magnetares, estrellas de neutrones con una masa un poco mayor que la del sol, son capaces de contenerla comprimida en un radio de aproximadamente 10 kilómetros, mientras que aquél requiere de 696.000 kilómetros, informa el CSIC.
El trabajo, realizado desde el Instituto de Ciencias del Espacio, centro mixto del CSIC y el Instituto de Estudios Espaciales de Cataluña, aparece en el último número de 'Astrophysical Journal'.
La estrella Swift J1822.3-1606, ubicada a 16.300 años luz de la Tierra, en la constelación de Sagitario, tiene aproximadamente una vida de 550.000 años, un objeto relativamente joven del universo cósmico.
La directora de la investigación, Nanda Rea, indica que, "al contrario de lo que la teoría predecía sobre estos objetos, el magnetar muestra un campo magnético externo muy débil. El análisis de los datos ha demostrado que es el segundo objeto de su clase con un campo magnético débil, similar en intensidad al de los púlsares".
En la noche del 14 de julio de 2011, una repentina erupción de rayos gamma de la estrella Swift J1822.3-1606 fue observada por el instrumento BAT (Burst Alert Telescope) del satélite Swift de la NASA.
Tras la erupción, los investigadores dirigieron los instrumentos espaciales de rayos X hacia esa zona y se realizó un programa de monitorización del objeto durante varios meses. Al telescopio espacial Swift se le unieron Chandra, RXTE, Suzaku y XMM- Newton. Observaciones complementarias en el óptico con el Gran Telescopio de Canarias y en el infrarrojo con el Telescopio Infrarrojo UK en el Observatorio de Mauna Kea mostraron la ausencia de un objeto en esa zona en ese rango óptico e infrarrojo del espectro electromagnético, reforzando la teoría de la presencia de un magnetar.
"Este magnetar pone en duda la anterior categorización, ya que presenta las características de su clase, como las erupciones magnéticas violentas, pero un campo magnético externo similar a la de un radio púlsar", destaca la investigadora del CSIC.
Hasta ahora se creía que los magnetares se diferenciaban de los radio púlsares por tener un campo magnético muy intenso. El campo magnético de un magnetar es aproximadamente 1.000 veces mayor que el de un púlsar normal, que además es alrededor de 1.000.000.000.000.000 veces mayor que el del sol.
Estos campos magnéticos tan altos tienen líneas magnéticas tan retorcidas que de repente se rompen y experimentan erupciones de partículas de muy altas energías, tal y como sucede en el sol. Por el contrario, los púlsares no sufren erupciones repentinas y tienen una emisión quieta y tranquila.
Rea señala que "el descubrimiento de este segundo objeto con características de magnetar, pero con un campo magnético de un radio púlsar fortalece la idea de que el comportamiento de tipo magnetar puede presentarse en un rango de objetos estelares mucho más amplio de lo que se creía en el pasado".
Posiblemente, añade, este comportamiento esté relacionado con la forma en que se genera el campo magnético en el interior y en la corteza de la estrella y no al campo más externo, que es el único que se puede medir con las observaciones.
(SERVIMEDIA)
16 Jul 2012
JCV/man