Desmantelada una agencia de contratación de “muleros” para traer hachís de Marruecos
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La Policía Nacional ha desmantelado en la provincia de Sevilla una red especializada en contratar a “muleros”, personas que se dedicaban a transportar hachís desde Marruecos a España en el interior de su cuerpo, y que simulaba ser una oficina de empleo.
En la operación han sido arrestadas 20 personas, 19 de ellas marroquíes, y se han intervenido cerca de 2.000 bellotas de hachís. La organización contaba con varias viviendas en la provincia de Sevilla donde llevaban a cabo el reclutamiento.
Por estos pisos pasaban casi un centenar de mulas cada mes, para hacer entrega de la droga transportada y cobrar por sus servicios. El líder de la red era el responsable de recibir las “solicitudes de empleo” de los correos humanos y autorizarlas.
La investigación se inició a mediados de octubre de 2011 cuando los agentes detectaron en Sevilla la presencia de un grupo organizado dedicado al tráfico de hachís. Esta organización se estructuraba en dos ramas.
La primera de ellas, con sede en Marruecos, se encargaba de suministrar la droga a las” mulas” en el país africano. La otra, afincada en nuestro país, recibía a los “muleros”, almacenaba el estupefaciente, y lo distribuía en varias provincias andaluzas.
ENTREGA DEL HACHÍS
A medida que las investigaciones avanzaron, los agentes fueron identificando uno a uno a los componentes de la rama española, y determinando las funciones que desempeñaban dentro de la organización.
Salvo una persona, la red estaba compuesta por ciudadanos de nacionalidad marroquí. Las personas contratadas procedían de toda la geografía española y generalmente transportaban las bellotas de estupefaciente en el interior de su organismo.
En algunas ocasiones modificaban la forma de transporte, camuflando el hachís dentro de botellas o en huecos ocultos habilitados en los vehículos en los que viajaban.
Una vez en España, se dirigían hasta dos viviendas ubicadas en las localidades sevillanas de Coria del Río y La Algaba. Allí permanecían hasta que expulsaban la droga ingerida y posteriormente, según la cantidad entregada, cobraban por el transporte.
Finalmente, la trama contaba con una red de distribución y venta, que surtía de estupefaciente a compradores habituales. Estos a su vez, se lo facilitaban a pequeños camellos y consumidores.
Los investigadores comprobaron que algunos de los “pasadores” utilizaban a sus propios hijos menores de edad para que los acompañasen en los momentos que consideraban más peligrosos, y de este modo pasar desapercibidos.
CIEN MULAS AL MES
A lo largo de la investigación los agentes comprobaron que casi un centenar de correos humanos pasaban cada mes por las viviendas de la organización. Además, la gran mayoría realizaba más de un viaje para incrementar sus beneficios.
Los encargados de recibir la droga también se ocupaban de guiar hasta los pisos a los “muleros” que desconocían su ubicación y eran los responsables de pagarles por su trabajo.
Numerosas personas solicitaban “trabajo” al responsable del grupo, quien les autorizaba a entrar en la red de correos humanos dedicados y a viajar hasta Marruecos a recoger la droga sin pagar nada por ella para traerla finalmente a España.
Durante la operación se ha detenido a 20 personas, 7 miembros de la estructura principal de la organización en España y 13 correos humanos sorprendidos “in fraganti” en el interior de los pisos.
En el momento del arresto, alguno de los “muleros” todavía no había expulsado la droga del interior de su cuerpo y tuvieron que ser trasladados al hospital.
(SERVIMEDIA)
07 Jul 2012
DCD