Rajoy hizo estas declaraciones durante su participación en la sesión de control al Gobierno del Congreso, donde respondió dos preguntas del secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, y del portavoz del PNV, Josu Erkoreka, sobre la cumbre de la UE de esta semana.

El jefe del Ejecutivo reconoció que "poder financiarnos hoy es el tema capital" para España, ya que la prima de riesgo se encuentra por encima de los 500 puntos y los intereses que se pagan en el mercado secundario por la deuda nacional roza el 7%.

Rajoy esgrimió que, por este motivo, España, Italia y otros países "vamos a intentar que se tomen decisiones razonables" para que Bruselas tome cartas en el asunto.

Para solucionar este problema, Rajoy coincidió con Rubalcaba en que es necesario que el BCE intervenga en los mercados con inyección de liquidez y compra de deuda soberaba de los países de la zona euro.

Además, Rajoy confió en que el Consejo Europeo que mañana comienza en Bruselas sirva para tomar decisiones "rápidas, claras y contundentes" a favor de la integración europea, con un sistema fiscal y bancario conjunto.

En su opinión, es el mejor modo de recuperar la credibilidad en la economía europea y de demostrar a los mercados "la irreversibilidad del euro".

CRECIMIENTO

El portavoz del PNV Josu Erkoreka fue el primero en preguntar al presidente por la posición que piensa mantener en el Consejo europeo de esta semana. "Queremos saber lo que va a hacer, no a decir. Queremos conocer las medidas concretas que va a proponer en el Consejo para promover el crecimiento y el empleo", ahora que todas las instancias y líderes internacionales reconocen que sin estímulo no habrá recuperación.

El presidente del Gobierno reiteró que el crecimiento y la creación de empleo son "el gran objetivo nacional" y que tratará de lograr "decisiones razonables" para lograr mayor integración europea.

Rajoy resumió la posición que defenderá en Bruselas en cinco puntos. Propondrá en primer lugar "continuar con el esfuerzo de saneamiento de las finanzas públicas" porque España tiene un "enorme problema" de financiación que no se solucionará "si no emitimos un mensaje claro que de que nos tomamos este asunto en serio".

Defenderá también continuar con las reformas estructurales para mejorar la competitividad "como estamos haciendo en España". En el ámbito europeo, Rajoy planteará la necesidad de avanzar en la integración de los mercados nacionales y, en particular, en el mercado de trabajo.

Llevará también en su cartera una propuesta para la ampliación de capital del Banco Europeo de Inversiones, de manera que se usen fondos estructurales para favorecer a las medianas y pequeñas empresas.

Finalmente, reclamará medidas para estabilizar los mercados y tratar de rebajar las primas de riesgo e iniciar un proceso de integración fiscal y bancaria. Rajoy aseguró que "si (estas medidas) se llevaran a cabo y, sobre todo, si se hiciera con la rapidez que voy a demandar, sin duda serán buenas para favorecer ambos objetivos".

UNA CUMBRE CLAVE

Por su parte, Rubalcaba definió la cita de Bruselas como "clave" por la posibilidad de poner en marcha un plan de crecimiento y empleo para la Unión Europea, así como lograr una inyección del BCE para rebajar los tipos de interés por la deuda.

El líder del PSOE subrayó que es "fundamental" que el calendario de consolidación fiscal "se amplíe sin requerimientos adicionales de ajuste porque, entonces, lo que nos van a ampliar es la recesión" de la economía española.

También defendió el documento del presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, a favor de la unidad fiscal y bancaria, pero pidió que se debate en profundidad en el Parlamento español como "sede de la soberanía popular".

Rubalcaba abogó también por que el rescate financiero a los bancos españoles con problemas se haga de manera directa desde la UE y sin intervención del Estado y emplazó a Rajoy a "pelear por este fórmula" al tratarse de la más conveniente para el país.

Por último, el líder socialista garantizó a Rajoy el apoyo de su partido en el Consejo Europeo que comienza mañana al haber consensuado la posición española.