En un comunicado, la Federación de Industria del sindicato se refirió de esta manera a “la polémica suscitada en los últimos días tras las declaraciones del ministro de Consumo, Alberto Garzón, y la utilización partidista que de estas se están haciendo”.

Como sindicato mayoritario de la cuarta actividad industrial -tras el automóvil, la industria del petróleo y la energética-, CCOO subrayó que “en los últimos años, hemos defendido y nuestra acción sindical ha ido encaminada a ello, la lucha contra el fraude laboral en esta actividad” mediante campañas encaminadas a la lucha contra la proliferación de los falsos autónomos, la regularización laboral de trabajadores del sector y “la defensa de la mejora del convenio colectivo que regula los derechos y condiciones de más de 100.000 personas en España”.

En este sentido, la central sindical recordó que se trata de una actividad “preponderante y estratégica” en regiones como Castilla-La Mancha, Castilla y León, Extremadura, Cataluña, Aragón y Murcia, en las que defiende “la ganadería extensiva, y la industria cárnica sostenible en lo medioambiental, generadora de empleo de calidad, que genera una actividad económica sostenible en territorios amenazados por el fenómeno de la ‘España Vaciada’ y que emplea a cientos de miles de personas”.

Así, advirtió que “no todo vale en la industria cárnica” y que “seguiremos peleando para que estos principios sean los que rijan en esta actividad industrial y económica, a través de la negociación colectiva, la acción sindical y la construcción de una propuesta que de esas características a toda la cadena de valor de la industria cárnica”.

Asimismo, CCOO destacó que en 2019 publicó el documento ‘Posicionamiento ante la problemática de las macrogranjas porcinas’, en el que se mostró “a favor de toda actividad que genere empleo estable y de calidad” siempre y cuando estas actividades estén sujetas “a una viabilidad social, económica y ambiental”.

Por último, el sindicato también indicó que en dicho documento aseguró que “no hay que analizar solamente los empleos que produce, sino también los que destruye, valorando y teniendo en cuenta que la UE, a través del II Pilar de la PAC -el Desarrollo Rural-, pretende potenciar el mantenimiento de la vida y las personas en los pueblos, evitando su despoblamiento y apostando por actividades que generen empleo de calidad y tengan en cuenta la dimensión social, ambiental y económica”.