Agregó que el PRISMA, ahora prorrogado aunque tenía una vigencia de 2008 a 2011, tiene 45 obras, contratos que fueron licitados y publicados en el Boletín Oficial de la Comunidad de Madrid los meses de diciembre de 2010 y enero febrero 2011, y destacó que de esos contratos solamente se han adjudicado 19.

Según Almazán, hay 26 grandes obras “en muchos municipios de la región que no se sabe qué pasa con ellas” y consideró que esto afecta de manera “grave” a los ayuntamientos y a los vecinos, ya que esas licitaciones “fueron aprobadas en los plenos de los consistorios y correspondían en su mayoría a mejorar las vías públicas de las ciudades, lo que repercutiría en beneficio de los ciudadanos”.

“Es una pésima gestión por parte los responsables de Nuevo Arpegio, que es la empresa que tiene que gestionar estos proyectos, que a estas alturas, de 42 millones de euros, que era volumen de licitación de esos 45 contratos, sólo estén en este momento adjudicados 10 millones de euros”, explicó.

Afirmó que ese crédito estaba previsto para esas obras, por lo que durante la Comisión de Vigilancia de las Contrataciones preguntó sobre este asunto al viceconsejero, ya que la consejera de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio no compareció.

Tras manifestar que el viceconsejero "no ha sido capaz de dar una sola explicación verosímil”, puso como ejemplo de la “mala gestión del PRISMA” la situación del municipio de El Molar, del que dijo que es "el ejemplo de hasta qué punto hay un desgobierno y un descontrol por parte de la Comunidad de Madrid”.

Almazán explicó que para esta localidad el PRISMA contempla una inversión de 1.371.000 euros, por lo que preguntó al viceconsejero por la aparición de carteles en el municipio en los que se informa de que la inversión es de 2.407.000 euros.