En una comparecencia expresa en la sede del partido en Ferraz, Castellanos destacó la bajada de más de 70.000 parados en diciembre, que supone un descenso de 900.000 respecto al año anterior, de ellos más de 480.000 mujeres y más de 140.000 jóvenes, dos de las prioridades del Gobierno.

En cuanto a los afiliados a la Seguridad Social, subrayó que el año pasado se crearon 822.000 empleos, de forma que ya hay 362.000 más que cuando comenzó la pandemia y están trabajando 20 millones de personas, cifra “que no se conocía desde 2007”.

Presentó los datos como muestra de una recuperación económica “que es justa, es eficaz y es rápida”, pues se une a la subida de las pensiones y del salario mínimo interprofesional, a la creación del Ingreso Mínimo Vital y a la revisión al alza de las previsiones económicas. “Todo es compatible frente a esos agoreros de la derecha que decían que íbamos a perder un 25% del PIB”, estableció.

Castellanos coligió que “hay dos formas de salir de las crisis”, porque tras la de 2008 “las recetas neoliberales de la derecha consistieron en políticas restrictivas” que tardaron 12 años en recuperar el empleo anterior y lo hicieron precarizando el mercado liberal. Frente a ellas, defendió como “seña distintiva de la democracia” la creación de “un trabajo más estable, con menos precariedad y más calidad”.

“Tenemos que llamar a la derecha para que deje de incurrir en mentiras. Pueden elegir sus opiniones pero no pueden elegir los hechos”, prosiguió, antes de proclamar que “las cifras de empleo y afiliación a la Seguridad Social son rotundamente buenas” y de “llamar al principal partido de la oposición” a que aprenda de empresarios y trabajadores y “se sume a este tren de progreso y recuperación”.

Así, llamó a “ser optimistas” y “confiar en nuestras fuerzas” y remató que “si trabajamos todos juntos”, España tendrá “unos datos de recuperación, de empleo y de incremento salarial como pocas veces hemos visto en nuestra historia reciente”.