Según una presentación remitida este martes a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), el negocio de exploración y producción (`upstream´) será el “motor de crecimiento” de Repsol.

La compañía que preside Antonio Brufau explica que la “expropiación ilícita” de YPF por parte del Gobierno de Argentina “no afecta a la capacidad de crecimiento de ninguno de los negocios fuera” de ese país.

La petrolera quiere multiplicar por 1,8 su beneficio neto en 2016, y destaca que entre sus objetivos fundamentales está “maximizar el retorno de la inversión”.

Además, subraya que mantendrá una política competitiva de retribución al accionista y abre la puerta a realizar desinversiones y venta de acciones en autocartera por un importe de hasta 4.000 ó 4.500 millones de euros.