El portavoz socialista de Defensa en el Senado, Pedro Abad, aprovechará la elección de Francois Hollande como nuevo presidente de Francia, para recordar que el país vecino comenzará a estudiar la retirada de las tropas francesas de Afganistán.

Los socialistas están interesados en conocer si el Ejecutivo se plantea algún cambio en sus perspectivas, dado el giro estratégico que imprimirá Hollande a la política francesa en esta materia.

La tesis sostenida por el Gobierno de Mariano Rajoy hasta ahora se basaba en la convicción de que España no actuaría de manera unilateral en relación a Afganistán.

Hasta ahora el criterio de la OTAN se resumía en que las tropas internacionales desplegadas en ese país saldrían todas juntas culminando el proceso de repliegue en 2014, pero la posición de Francia podría suponer una variación sustancial de estos planes.

Morenés aseguró en sus comparencias de inicio de legislatura que España seguiría trabajando en Afganistán más allá de 2014, fecha en la que está prevista la retirada y no determinó si quedará alguna fuerza de combate española tras el repliegue.

En estos momentos, España tiene desplegados en Afganistán alrededor de 1.500 militares, que trabajan encuadrados en la misión de la ISAF que patrocina la OTAN.