El Gobierno cree que intervenir Cataluña generaría un problema político mayor que el déficit

- Ministros y cargos del PP desaconsejan a Rajoy que tome el control de las cuentas de la Generalitat

- No quieren incurrir en el mismo error político cometido durante la reforma del Estatuto catalán

MADRID
SERVIMEDIA

El Gobierno no está dispuesto a intervenir las cuentas económicas de Cataluña, aunque incumpla el objetivo de déficit en los primeros meses de 2012. La razón es política, ya que el equipo de Rajoy considera que tomar el control de la Generalitat generaría un problema de mayores consecuencias.

Así lo han reconocido a Servimedia fuentes del Gobierno y del Partido Popular que han advertido a Mariano Rajoy de esta circunstancia y que le han recomendado apostar por un diálogo intenso con el Ejecutivo autonómico para convencer a Artur Mas de que intensifique los recortes y reduzca al máximo el déficit.

En el Gobierno y en el PP están convencidos de que la intervención de Cataluña desataría un conflicto de enormes dimensiones y alimentaría para muchos años el discurso victimista del nacionalismo.

Los populares no olvidan la animadversión que desató el recurso al Tribunal Constitucional contra el Estatuto de Cataluña y sostienen que la intervención económica de la Generalitat por incumplir el objetivo de déficit público sería aún peor visto por la clase política y los propios ciudadanos.

Algunos ministros y altos cargos del Partido Popular han trasladado este diagnóstico a Mariano Rajoy y le han advertido de que el enfrentamiento entre Estado y Cataluña se reactivaría automáticamente si el Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas toma el control de las cuentas autonómicas.

Las fuentes consultadas aseguraron a Servimedia que esta circunstancia impide una intervención económica en el caso de Cataluña, cosa que no sería tan traumática en términos políticos si se produjera con otra comunidad autónoma como Andalucía y Comunidad Valenciana, las que más riesgo corren por su elevado desvío del gasto público.

DIÁLOGO ANTES QUE CONFLICTO

Con esta idea en la cabeza, Rajoy lanzó el pasado jueves un mensaje a la Generalitat de Cataluña para "hacer cosas juntos, y cosas grandes". Era su manera de responder a la amenaza de Artur Mas de convocar elecciones y romper lazos institucionales si el Ejecutivo central interviene esta comunidad autónoma por incumplir el objetivo de déficit.

Rajoy invitó a la Generalitat y a CiU a “hacer política con mayúsculas, con visión a medio o largo plazo”, porque es lo que “toca” en favor del “interés general” y porque “España somos todos”.

La presidenta del Partido Popular de Cataluña, Alicia Sánchez Camacho, ha intentado mediar en las últimas semanas para evitar un enfrentamiento entre el Gobierno central y la Generalitat. Prueba de ello son sus declaraciones del pasado viernes al salir de La Moncloa de una reunión con Mariano Rajoy.

Sánchez Camacho pidió al presidente del Gobierno que mantenga una reunión con Artur Mas "lo antes posible" para abordar la exigencia del déficit público, al que se refirió como "el único camino" posible en estos momentos para recuperar la confianza de los mercados y lograr una recuperación económica.

La líder del PP catalán actuó como portavoz extraoficial del Gobierno al asegurar que no existe "riesgo de intervención" para Cataluña por su elevado déficit público y al expresar la plena confianza de Rajoy en los recortes que está aplicando la Generalitat para bajar el gasto público y cumplir el objetivo autonómico del 1,5% para 2012.

Sánchez Camacho explicó en rueda de prensa que Rajoy le había trasladado un mensaje de tranquilidad para Cataluña, hasta el punto de descartar por completo que la comunidad necesite ser intervenida por el Gobierno central. "Rajoy ha valorado muy positivamente la actitud de Cataluña en el cumplimiento del déficit y cree que el catalán es un gobierno serio que cumple con el déficit ", dijo.

EVITAR ERRORES DEL ESTATUTO

Sin embargo, fuentes gubernamentales reconocieron a Servimedia que el Gobierno tiene tanto miedo a un problema político con Cataluña como a uno económico. En el PP tienen todavía muy presente la crispación social que generó en esta comunidad la reforma del Estatuto de autonomía y la fuerte oposición que mantuvo entonces el PP, que llegó a recoger cuatro millones de firmas en toda España contra la modificación estatutaria.

El PP de Cataluña sufrió una persecución política por aquella decisión, de la que le ha costado años recuperarse. Ahora, a poco más de un año para las elecciones autonómicas, no quiere volver a caer en el mismo error y por eso también ha recomendado a Rajoy que busque alternativas a la intervención para que Cataluña cumpla con el déficit.

En 2011, las comunidades autónomas estaban obligadas a rebajar el déficit al 1,3% pero se descontrolaron hasta el 2,94%. En el caso concreto de Cataluña, se disparó hasta el 3,72%. En 2012, todos los gobiernos regionales deben reducir el déficit al 1,5% para cumplir con las exigencias de la Unión Europea.

De momento, Cataluña ha enviado este mismo lunes un primer documento al Ministerio de Hacienda sobre el plan de ajuste que pretende aplicar para reducir el déficit, después de que Cristóbal Montoro rechazara el borrador inicial e instara a la Generalitat a corregirlo para cumplir con el objetivo del 1,5% a final de año.

(SERVIMEDIA)
02 Mayo 2012
PAI/gja