Así lo indicó en el Pleno del Senado durante el debate de la Ley de Estabilidad, donde subrayó que la norma traslada a España mecanismos que aplica la Unión Europea en cuanto a supervisión de las finanzas y una posible intervención, para agregar que el texto “no va contra nadie”.

En todo caso, Montoro subrayó que el Gobierno “no dudará en aplicar esta ley” e intervendrá cualquier administración que “no esté encarrilada en la consecución del objetivo de déficit”.

“Es una ley para aplicarla ya, para que la tengamos en vigor el 1 de mayo” y “sea garantía de que España va a cumplir con su déficit público”, destacó el titular de Hacienda.

ACCESO A LOS MERCADOS

Además, defendió que la Ley de Estabilidad es una “garantía” y la “llave de acceso a los mercados, porque de ellos depende la financiación”.

Según el ministro, se trata de una ley “muy importante”, de una “reforma estructural” cuyo trámite parlamentario “está siendo seguido” por los socios europeos y los mercados.

Por ello, pidió a los grupos parlamentarios “estar a la alturas de las circunstancias” porque es momento de “no ser miopes” y hacer políticas de “luces largas”, ya que “la salida de la crisis está en el cumplimiento del equilibrio presupuestario”.

Hay que “sumarse a este proyecto de ley, sumar voluntades políticas”, pues aunque haya “ideologías” diferentes, éstas no debe estar presentes “a la hora de asentar el precepto de que en la gestión de las finanzas no cabe el desorden y el desequilibrio”.

Montoro recordó que esta norma es fruto de la reforma de la Constitución pactada entre PP y el Gobierno del PSOE el pasado verano, y quiso dejar claro que el déficit del 0% que recoge el texto es “compatible” con esos acuerdos políticos.