En rueda de prensa celebrada hoy en Barcelona con motivo de la Junta de Accionistas de la compañía, Villaseca indicó que los objetivos para 2012 “son duros”, por lo que se están planteando desinversiones, aunque la intención es “seguir luchando y no renunciar al compromiso de 2012”.

Villaseca reiteró el compromiso de la compañía de alcanzar los objetivos para este año, que prevé lograr un resultado bruto de explotación de 5.000 millones y un beneficio neto de 1.500 millones.

No obstante, indicó que las inversiones que la compañía realizará a lo largo de este año se llevarán a cabo con “ajustes”, dada la coyuntura económica actual y los cambios en el sistema regulatorio del sector en España.

Entre las inversiones que la compañía tiene previstas se encuentran nuevos puntos de suministro de distribución de gas, 155.000 en España, 24.000 en Italia y 316.000 en Latinoamerica; una transformación de los yacimientos existentes en el área de Marismas; la expansión del negocio de energías renovables en el ámbito internacional, y el desarrollo de la central hidráulica en Torito (Costa Rica).

Los objetivos para 2012 se fijan en alcanzar los 5.000 millones de Ebitda, y una deuda neta situada entre los 15.000 y los 16.000 millones de euros.

Asimismo, destacó el fortalecimiento financiero de Gas Natural Fenosa con la emisión de un bono por 750 millones a 6 años en enero de este año, los avances adicionales en la titulización del déficit de tarifa, por los que recibirán 365 millones, una nueva financiación de 500 millones por parte del Banco Europeo y la renovación de líneas de crédito existentes.

La Junta General de Accionistas de la compañía aprobará hoy un aumento del 10,7% en la remuneración al accionista, pasando de un dividendo total de 742 millones en 2011 a 821 millones este año.

Por su parte, el presidente de Gas Natural Fenosa, Salvador Gabarró, destacó la evolución bursátil de la compañía en 2011 con respecto al Ibex 35 y el aumento del 10,3% en los beneficios, que reportaron 1.325 millones a pesar de la caída de la demanda de gas y la "insostenible" situación del déficit de tarifa eléctrica.