La diputada de IU Carmen Villares dijo que la Comunidad de Madrid debería optar por una “política de producción agraria de calidad, generadora de empleo y conservadora del medio ambiente”, y afirmó que ello es “incompatible con los cultivos transgénicos, cuyos efectos sobre la biodiversidad y los consumidores no se han podido garantizar”.

Explicó que los estudios demoscópicos dejan patente que la mayoría de la ciudadanía española y madrileña rechaza que los transgénicos formen parte de la alimentación, como también se manifiestan organizaciones ambientales, agrarias y de consumidores, que alertan de la amenaza que representan para la salud y el medio ambiente.

En esta PNL también se insta al Gobierno de Aguirre a realizar las “acciones necesarias para evaluar los impactos económicos, ambientales o de otra naturaleza que el cultivo de transgénicos esté ocasionando, o pudiera ocasionar, sobre el medio ambiente y sobre los agricultores, tanto ecológicos como convencionales”.

“Queremos que la Comunidad de Madrid, en el ámbito de su competencia, promueva la extensión de la declaración a la totalidad del territorio español”, indicó la diputada de IU.