Calvo Sotelo reconoció en Rne que, en un primer momento, "no reconocí a Tejero; creí que eran los terroristas que habían robado trajes de la Guardia Civil pocos meses antes. Sin embargo, Gutiérrez Mellado nos confirmó poco después que eran guardias civiles" y forcejeó con ellos en un "gran gesto de valor".

"Aquella noche pensé lo mismo que Maura tras su sgunda crisis, en 1918: 'a ver quién es el guapo que se ocupa ahora del poder'", dijo Calvo Sotelo, quien agregó que, a pesar de haber recibido en herencia un golpe militar, "afortunadamente pude entregar a Felipe González un país tranquilo, confiado en su democracia e instituciones".

El ex presidente del Gobierno zanjó también la polémica sobre posibles tramas ocultas y "elefantes blancos", de los que tanto se habla en libros y reportajes de investigación. A su juicio, "no hay nada oculto ni nuevo en l 23-F. Los periodistas ya han revelado todo cuando hay". En realidad, concluyó, el golpe de Estado "fue una chapuza porque no había nada detrás".