Así lo indicó el Pleno del Senado, donde se debatía el techo de gasto y el objetivo de estabilidad presupuestaria, que finalmente se fija en 2012 en el 5,3% del PIB, lo que supondrá un ajuste adicional de alrededor de 5.000 millones, que asumirá el Estado.

Montoro señaló que “nadie dice que es un camino fácil, un camino de rosas”, para reiterar que “es necesario recorrerlo para salir cuanto antes de la crisis”.

En este proceso, el Gobierno se compromete a llevar a cabo políticas equitativas y justas, con cambios fiscales, pero que no hagan “cargar sobre las espaldas de las capas sociales” con ingresos más bajos esos esfuerzos.

Además, “vamos a renunciar a proyectos de gasto, y eso nos abrirá las puertas del crecimiento económico”.

Desde el Gobierno garantizaron que los Presupuestos Generales del Estado para 2012 serán “realistas”, recogerán “esfuerzos” y “aspiran a abrir la esperanza de acabar cuanto antes con esta crisis económica y la destrucción de puestos de trabajo”.

“Se pueden hacer ajustes presupuestarios equilibrados socialmente”, dijo el responsable de Hacienda, quien quiso dejar claro que “estamos convencidos de que no hay atajos, no se pueden acortar los caminos, hay que volver cuanto antes al equilibrio de todas las administraciones”.

En todo caso, el ministro fue ambiciosos y dijo que en la medida de lo posible hay que “aspirar a gastar menos” de lo que marque finalmente el techo de gasto y “a equilibrar cuanto antes las finanzas públicas”.

El ministro quiso destacar el “compromiso del Gobierno por la estabilidad presupuestaria”, algo que además “está sustentado en la Constitución española”.

Además, subrayó que hay un “compromiso europeo” porque “somos Europa, somos el euro” y “tenemos que volver cuando antes a ser un socio fiable”.