En su intervención, Babín se felicitó de que desde la creación del Plan Nacional se ha conseguido "un descenso muy destacado en el consumo de heroína", con la notable disminución "de los graves problemas asociados", y por el "reciente descenso en la ingesta de cocaína".

De hecho, en 2009 y 2010 España registró por primera vez descensos en el consumo de cocaína para las poblaciones de 15 a 64 y de 14 a 18 años, respectivamente, declaró Babín.

Con todo, advirtió que pese a "los grandes logros" no se debe minimizar la percepción del riesgo, pues esto dificultará alcanzar "nuevos resultados y objetivos". Tampoco "debemos olvidar que la droga sigue siendo un problema para muchas personas y sus familias", subrayó.

DECIDIDOS CONTRA EL ALCOHOL

A partir de la información recogida por el Observatorio Español de la Droga y las Toxicomanías, Babín sostuvo que "las sustancias con potencial adictivo y estatus legal en nuestro país (alcohol y tabaco) son las más consumidas tanto por la población general como por los estudiantes, seguidas por el cannabis y los hipnosedantes sin receta".

Tabaco y alcohol son igualmente las drogas, dijo, "con una edad de inicio media menor", mientras que la ingesta de hipnosedantes entre la población general y de anfetaminas entre los estudiantes registra un inicio a edades más elevadas.

A juicio de Babín, el abuso "de alcohol por los menores de edad es uno de los principales problemas, o el principal, a los que nos enfrentamos en la situación actual en relación con el consumo de drogas", por lo que "a él queremos dedicarnos con plena intensidad desde el Plan Nacional sobre Drogas", anunció.

"Está presente en casi el 90% de los casos de policonsumo", prosiguió Babín, y apuntó que "es la sustancia psicoactiva mayoritariamente consumida, la más fácil de conseguir y la considerada de menor riesgo para la salud". "También es la droga que más demanda asistencial genera, seguida de la cocaína, los opiáceos y el cannabis", agregó.

Asimismo, Babín destacó el descenso en el consumo de tabaco durante los últimos años y subrayó que "dentro de las ilegales, el cannabis es la droga más utilizada". Su consumo permanece estable, aunque crece el que se realiza de forma experimental, declaró.

También aumenta el consumo experimental de hipnosedantes, mientras que la heroína se convierte en la droga menos demandada. "Es la que se percibe como más peligrosa para la salud", señaló Babín, y además su administración mediante inyección "cae de forma espectacular", resaltó.

Salvo en el caso de los sedantes, los hombres registran mayores tasas de consumo en todas las sustancias, aunque entre los adolescentes la prevalencia es prácticamente igual, e incluso mayor para el alcohol y el tabaco entre las chicas.

Por último, Babín adelantó el propósito de su departamento de reforzar los programas de prevención en las escuelas, redes sociales y para la población general; impulsar el diálogo y la coordinación con ONG y asociaciones a fin de mejorar la asistencia y reinserción; fomentar la coordinación con las fuerzas de Seguridad del Estado, sobre todo en lo que se refiere a menores; impulsar una atención integral a las adicciones dentro del Sistema Nacional de salud, y potenciar la investigación sobre drogodependencias y enfermedades concomitantes.

"Se trata de medidas nuevas, complementarias de las que ya se vienen realizando que se van a mantener en su integridad, intentando en la medida de lo posible realizarlas con mayor intensidad y alcance", concluyó.