A través de la sección de Derecho y Discapacidad, con más de 1.000 personas inscritas, actuará en dos dimensiones para mejorar la empleabilidad de los colegiados con discapacidad. Así, por un lado, creará una bolsa de trabajo específica para este colectivo; y, por otro, ayudará a mejorar la accesibilidad, eliminando barreras en los despachos que se comprometan a la contratación estable a través de este proyecto.

En este sentido, el presidente de la sección de Derecho y Discapacidad del ICAM, Rafael de Lorenzo, destacó también la importancia de abanderar desde la corporación madrileña la creación de secciones homónimas en los colegios de la abogacía a nivel nacional para sumar a esta causa a toda la profesión. Asimismo, apostó por seguir avanzando en la eliminación de barreras a través de un plan que evalúe la accesibilidad en las instalaciones del ICAM, incluyendo las Salas Abogacía situadas en los órganos judiciales, a fin de conseguir una accesibilidad plena.

Por ello, el área de Defensa de la Abogacía del ICAM ha elaborado un plan de acción para la mejora de las condiciones de accesibilidad en las sedes judiciales de la Comunidad de Madrid, con el objetivo de contribuir a que todos los profesionales de la abogacía puedan ejercer su profesión de una manera plena, evitando cualquier tipo de discriminación por razón de discapacidad.

"Se trata de un ambicioso plan diseñado para dar visibilidad a este colectivo de profesionales, dotándoles de herramientas y cauces que faciliten y garanticen el ejercicio profesional en igualdad de condiciones", explicó el ICAM.

Además, la institución prevé la creación de una mesa de trabajo, la puesta en marcha de talleres o la difusión de buenas prácticas en esta materia desarrolladas por los órganos y sedes judiciales, y velará por la aplicación de la legislación vigente en materia de discapacidad.

Esto mantiene el apoyo que venía prestando a letrados con discapacidad hasta el momento, aunque este se centraba en aquellos letrados con discapacidad auditiva, sobre quienes recordaron que su labor profesional se ha visto dificultada por el uso obligatorio de mascarillas como consecuencia de la pandemia.

En este sentido, el ICAM ha comprobado el funcionamiento de los sistemas de audición instalados en la sala de vistas de diferentes juzgados y ha solicitado actuaciones telemáticas por razones de discapacidad.