El informe ‘El VIH y el sida: panorama mundial’ advierte de que la prolongación de la pandemia de Covid-19 está agravando las desigualdades que durante tanto tiempo ha provocado la epidemia de VIH, y está aumentando el riesgo de que los niños vulnerables, adolescentes, mujeres embarazadas y las madres lactantes no puedan acceder a servicios de prevención y tratamiento del VIH que les pueden salvar la vida.

La directora ejecutiva de Unicef, Henrietta Fore, recalcó que, si no se intensifican los esfuerzos por subsanar las desigualdades que provoca la epidemia de VIH y que ha agravado la pandemia, es posible que más niños se infecten y pierdan la batalla contra el sida.

Uno de los datos más alarmantes que refleja el estudio, es que dos de cada cinco niños que padecen VIH desconocen su estado, y solo algo más de la mitad de los que la sufren reciben tratamiento antirretroviral. La entidad insistió en que algunos de los obstáculos que impiden acceder a los servicios son conocidos y perduran desde hace tiempo, como son la discriminación y las desigualdades por razón de género.

El estudio refleja que, a principios de 2020, en muchos países se produjeron interrupciones importantes en los servicios de VIH a causa del coronavirus. Las pruebas de detección del VIH en los niños de países muy afectados disminuyeron entre un 50% y un 70%, mientras que los nuevos tratamientos para niños menores de 14 años se redujeron entre un 25% y un 50%.

Además, los confinamientos contribuyeron al aumento de las tasas de infección como consecuencia de los picos de violencia por razón de género, la restricción del acceso a una atención continuada y el desabastecimiento de productos básicos.

En algunos países se registró una disminución significativa de los partos en centros de salud, las pruebas de VIH entre las madres y los nuevos tratamientos antirretrovirales para el VIH. Un ejemplo extremo es el de la cobertura de los tratamientos antirretrovirales para las mujeres embarazadas de Asia Meridional, que disminuyó drásticamente de un 71% a un 56% en 2020.

‘El VIH y el sida: panorama mundial’ concluye que, en 2020, 160.000 niños y niñas de cero a nueve años, 150.000 adolescentes de entre 10 y 19 años, 120.000 niñas adolescentes y 35.000 varones, se infectaron por primera vez con VIH. Además, 120.000 niños, niñas y adolescentes murieron por causas relacionadas con el sida, 86.000 tenían entre cero y nueve años y 32.000 tenían entre 10 y 19 años.

Por último, en África Oriental y Meridional, las infecciones nuevas anuales entre los adolescentes disminuyeron un 41% desde 2010, mientras que, en Oriente Medio y Norte de África, las infecciones aumentaron un 4% a lo largo del mismo periodo. Los niños que han quedado huérfanos a causa del sida representan el 10% de todos los huérfanos del mundo, pero un 35% de todos los niños huérfanos vive en África Subsahariana.

Desde Unicef manifestaron que “es imprescindible ofrecer respuestas que estén basadas en evidencias y centradas en las personas, que fomenten la capacidad de resiliencia y sean sostenibles y, por encima de todo, equitativas”.