El periódico señala que la sentencia establece que la mujer ha incurrido en un delito de uso indebido de documento público auténtico y tendrá que afrontar tres meses de multa a razón de tres euros diarios (270 euros). Asimismo, relata que el fallo indica que se le concederá la suspensión de la pena de cárcel durante dos años, aunque advierte de que si durante ese periodo comete un delito de cualquier naturaleza implicaría el cumplimiento íntegro.

Los hechos ocurrieron el 12 de junio de 2020 en la calle Ventura de la Vega, en el barrio malagueño de Pedregalejo y la sentencia considera probado que la mujer fue sorprendida por la Policía Local estacionando su vehículo en la plaza reservada para personas con movilidad reducida.

Los agentes comprobaron que la tarjeta estaba expedida a nombre de su padre, que en ese momento no estaba con ella, lo cual supone una infracción, puesto que estos aparcamientos sólo se pueden usar en presencia de los beneficiarios de las tarjetas, que son personales e intransferibles. Los policías comprobaron, además, que el titular de la tarjeta había fallecido hacía más de ocho años, por lo que la mujer pasó a ser investigada por un delito penal.