Así lo dijo al exponer su informe de gestión en el 38 Congreso Federal del PSOE que se celebra este fin de semana en Sevilla. “Tenemos que sentirnos satisfechos de que es muy probable que nunca volvamos a tener una muerte a manos de la violencia política, de ETA”, dijo.

En su intervención, aseguró que los socialistas están “comprometidos y obligados a mantener la memoria de todas las víctimas, su recuerdo, a que la lección de esta negra página de la historia de la democracia esté presente”. “Por la convivencia en Euskadi, por su futuro, por eso que tanto hemos sentido tan de cerca, por eso por lo que hemos dejado tanto en el camino”, alegó Rodríguez Zapatero. “Compañeros de Euskadi: Mi reconocimiento, mi gratitud, para siempre, Patxi”, añadió, dirigiéndose al lehendakari, sentado frente a él en el auditorio.

Rodríguez Zapatero señaló que “lo más intenso, pero también lo más gratificante, ha sido ver a compañeros de Euskadi aguantar, no descansar, no dejar de soñar por alcanzar el fin de violencia, por ver el final de ETA”.

“Y como presidente del Gobierno, sin duda, sabiendo y consciente de que el objetivo de todos los demócratas era ver el fin de ETA, he apoyado a todos los que han trabajado en esta tarea, a todos los que de una u otra manera han buscado la paz”, añadió.

Recordó que en el último Congreso Federal del PSOE el partido rememoró a Isaías Carrasco, el último compañero que había sido víctima de ETA. “Para mí es un recuerdo muy especial, muy duro” que sucedió en los últimos días de la campaña electoral de 2008.