El principal objetivo del nuevo laboratorio es investigar el papel de las nuevas tecnologías en el ámbito de la neurociencia, su desarrollo para mejorar la calidad de vida de personas con daño o deterioro cerebral, así como la divulgación de los conocimientos adquiridos.

La clave de esta organización es fomentar la igualdad de género en el desarrollo y uso de las nuevas tecnologías aplicadas a la neurociencia y la rehabilitación de personas con daño cerebral adquirido, alzheimer u otros tipos de patologías.

También están realizando estudios sobre el impacto de las nuevas tecnologías en la rehabilitación de daño cerebral adquirido, el desarrollo de software en Realidad Virtual para el uso en neurorehabilitacion, la redacción y publicación de manuscritos y su presentación en congresos, la experimentación con software y hardware para llevar a cabo estos fines, entre otros.

El presidente de NeuroLab, el neuropsicólogo clínico José María Torralba, destacó que la creación de esta institución es para conseguir que el ámbito científico más experimental, el desarrollo técnico y la atención primaria se unan en un mismo punto dando como resultado una mejora en los servicios asistenciales a las personas más desfavorecidas y que han visto truncadas sus vidas tras el Daño Cerebral Adquirido (DCA).

“El desarrollo tecnológico aplicado en forma rigurosa y metódica tiene mucho que aportar mejorando la calidad de vida de miles de personas que han sufrido un DCA, que no hay que olvidar que es la primera causa de discapacidad en el adulto en la actualidad”, aseguró Antonio Tejada, que también forma parte del proyecto y sufrió un infarto renal grave y a consecuencia de ello es propenso a padecer futuros accidentes cerebrovasculares.