Según informó la Policía, en el marco de esta operación se ha detenido a tres personas y se han localizado 41 kilogramos de cocaína y 460.000 euros.

Uno de los arrestados almacenaba la droga y sustancias para su adulteración en una vivienda de Molina de Segura. En concreto, se trataba de un chalé en esta localidad murciana, donde se escondía un laboratorio para procesar estupefacientes.

Se trataba de una habitación especialmente construida y disimulada detrás de un armario ubicado en el garaje. Este dispositivo ocultaba un laboratorio completamente equipado para la manipulación y procesamiento de drogas.

En esta estancia se hallaron cuarenta y un kilogramos de cocaína; 100 kilogramos de sustancias para la adulteración y procesamiento de la droga; 460.000 euros en efectivo; un revolver del calibre 38 con quince cartuchos; así como otros efectos para manipular droga.

La investigación que ha permitido desarticular esta banda se inició a partir del análisis de operaciones anteriores realizadas contra el tráfico de drogas. Estos datos apuntaban al relevante papel que como distribuidor de esta sustancia desempeñaba un vecino de la localidad murciana de Ceutí. Esto permitió a los agentes detener a los integrantes de la banda cuando realizaban una de las ventas de estupefaciente.