Según explican estas organizaciones en un comunicado conjunto, el Ministerio ha asistido a una reunión con un punto del orden del día en el que habla “textualmente” de “coexistencia de maíz modificado genéticamente con maíz convencional y ecológico” y de “experiencias de agricultores afectados”.

Estos “efectos sociales y económicos” de la presencia de maíz transgénico en España llevan siendo denunciados por las organizaciones ecologistas y agrarias desde hace una década. Sin embargo, éstas se quejan de que “los niveles de irresponsabilidad política en el Gobierno han alcanzado cotas elevadas”.

Así, se quejan de que el Ejecutivo “sigue tolerando el cultivo a gran escala de organismos modificados genéticamente” en el territorio español, “en contra de la tendencia de la Unión Europea y de la mayoría de estados miembros”.