Además, durante el sábado y el domingo bajarán de forma importante las temperaturas, en el norte hasta siete grados, cuatro en el área central y dos en Andalucía, debido a la entrada de vientos fríos del noroeste que traen un nuevo frente.

El fuerte viento de las últimas horas disminuirá en intensidad, pero al soplar de noroeste la sensación térmica será de frío.

El viento superó este viernes los 140 kilómetros por hora en varios cabos del norte, como el de Peñas en Asturias y Estaca de Bares en A Coruña, un viento provocado por una borrasca muy profunda que pasó de madrugada por el Canal de la Mancha y se dirige por Francia y Alemania. "Tiene una extensión muy ancha y está provocando vientos muy fuertes, como el registrado en Peñas", indicó Rivera.

Esa misma borrasca es la causante de la mala mar, con olas que superaron los nueve metros en el Cantábrico Oriental.

El viento se acelerará más al llegar al Mediterráneo, aunque esta situación cambiará a partir del miércoles, cuando entrará un anticiclón que pondrá calma al panorama meteorológico.