Lo hizo durante su comparecencia ante la Comisión de Asuntos Exteriores del Congreso de los Diputados en la que presentó los detalles de las partidas del proyecto de ley de Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2022 correspondientes a su departamento.

García Montero aprovechó el inicio de su intervención para exponer que “cada presupuesto refleja las intenciones por las que quiere ir cada organismo, y el Cervantes es una institución muy viva, con muchos proyectos”, por lo que resulta necesario que el proyecto de cuentas públicas para el año que viene sea aprobado para “seguir trabajando en las mejores condiciones para la nación”.

Tras este exordio, entró en el detalle de las cifras reservadas para el Cervantes, que ascienden a 161,1 millones de euros, divididos en tres programas: el ordinario, con una dotación de 134,7 millones, un 7% más que en 2021; y el extraordinario, subdividido en dos partidas que suman 26,4 millones de euros.

García Montero subrayó que el presupuesto ordinario permitirá “abordar grandes proyectos, muy importantes para el prestigio de España en el mundo”, como la culminación de la puesta en marcha del nuevo centro de Dakar (Senegal), sobre el cual se trabaja con la previsión de que los Reyes puedan inaugurarlo el próximo mes de diciembre.

El director del Cervantes explicó que los cálculos estadísticos apuntan que la demografía mundial aumentará en 2.000 millones de habitantes en los próximos años, la mitad de los cuales nacerán en África, lo que, a su juicio, hace imprescindible “enseñar español, formar a profesores de español, hacer misiones académicas, conseguir que la cultura española sea importante” en ese continente.

La apertura de esta sede, que contará con una extensión en Costa de Marfil, representa “un primer modo de avanzarnos”, ya que quienes “vienen por detrás hablando francés y portugués están muy interesados en aprovechar el crecimiento demográfico de África para recortar la distancia del español”.

GIBRALTAR

García Montero también avanzó la previsión de reservar un “pequeño crédito” para afrontar la “posible reapertura” del centro del Cervantes en Gibraltar, una decisión que dependerá del resultado de las negociaciones entre la UE y Reino Unido en torno al ‘Brexit’.

Cabe recordar que el entonces ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, José Manuel García-Margallo, anunció en una comparecencia ante la comisión del ramo del Congreso en febrero de 2015 el cierre de esta sede con el pretexto de que en Gibraltar “todo el mundo habla español salvo los monos” y elevando el tono hasta afirmar que el Peñón es “una colonia como la copa de un pino”.

La apertura de una sede del Cervantes en Gibraltar se produjo en 2011 tras la suscripción de los Acuerdos de Córdoba entre el Gobierno presidido por José Luis Rodríguez Zapatero y las autoridades gibraltareñas en el marco del Foro Trilateral de Diálogo.

García Montero defendió la necesidad de reabrir este centro ante el “deterioro de la cultura española en el Peñón”, donde se ha dejado de enseñar español en los colegios, lo que impele a trabajar para “mantener la hermandad” de Gibraltar con España a través de la reanudación del trabajo de la institución que preside.

Incidió en la importancia de “reforzar nuestra presencia, reforzar los vínculos con nuestra historia, desde las distintas perspectivas que hay sobre el problema”, para reforzar el “proyecto de empatía” sobre el Peñón.

Reafirmó su convicción de que reabrir este centro es “bueno para la región”, pero confesó que lo que “me animó personalmente” fue escuchar la intervención del portavoz del PP en el Senado, Javier Maroto, el 2 de octubre de 2020 en la que pidió acciones en el Campo de Gibraltar, entre las cuales citó la apertura de una sede del Cervantes en el Peñón, una afirmación que fue refrendada un año después en una entrevista en ABC por el alcalde de Algeciras, José Ignacio Landaluce.

Esto le sirvió para atestiguar que “trabajar todos para conseguir la prosperidad compartida y la colaboración de nuestra cultura en los dos lados de la Verja, más que ahondar diferencias”, contribuye al bienestar de la zona y de la cultura española.

OTROS CENTROS

García Montero expuso, en relación con la apertura de una sede del Cervantes en Los Ángeles (EEUU), que ya se ha encontrado un edificio donde ubicarla: unos antiguos estudios de cine en Hollywood, y señaló la idoneidad de su apertura en el hecho de que California cuenta con más de 12 millones de hispanohablantes y de descendientes de orígenes hispanos, además de ser el lugar donde están radicadas las sedes de las grandes empresas tecnológicas.

En el caso del nuevo centro en Seúl (Corea del Sur), arguyó la importancia de estar presentes en una zona geográfica -el Pacífico- donde se están orientando las estrategias de las grandes potencias.

A su vez, confirmó que el año próximo los Reyes presidirán el Congreso de la Lengua Española que se celebrará en Arequipa (Perú), una cita que debería ser el lugar perfecto para que “cualquier malentendido se resuelva” y, de este modo, conseguir que “la cultura española siga siendo una referencia en América Latina”, y para la cual el Cervantes contribuirá con 120.000 euros para su organización.

Por su parte, confesó su optimismo, refrendándolo con datos, sobre el futuro del Cervantes, como lo pone de manifiesto el hecho de que, a día 30 de septiembre, la certificación de los Diplomas de Español como Lengua Extranjera (DELE) es el 90% de lo realizado a 30 de septiembre de 2019.

También consideró meritorio que las matriculaciones en los estudios de español en el mundo cayeron un 14% en la época más dura de la pandemia, lo que “ha permitido mantener la alegre dificultad de nuestro trabajo cotidiano”, algo que agradeció al personal del Cervantes.

Por último, denunció los “salarios bajos” que perciben los trabajadores del Cervantes – algunos congelados desde 2010-, quienes, en función de las condiciones materiales de los países donde trabajan, tienen “complicado llegar a final de mes”.