Azpilicueta, que cree que los motivos de la convocatoria de la huelga general del 20-J son de carácter político, afirmó que España tiene un sistema de protección por desempleo que "no es el más acertado",ya que el porcentaje de salario que se cobra al estar parado es de los más altos de Europa y el período que se cobra también.

A su juicio, es un sistema "con una generosidad que deriva en ineficiencia", y que estimula la permanencia en la situación de desempleo y la no búsqueda de empleo. Para Azpilicueta, el decreto aprobado por el Gobierno "ha querido poner límites a ese exceso de generosidad, en un movimiento tímido".

Por ello, ve "sorprendente" que unas medidas "tímidas" que no alteran gravemnte la situación actual hayan provocado una reacción "virulenta y desproporcionada" en los sindicatos, convocando una huelga general. "Es una broma muy pesada, porque no está justificada una postura tan radical y extrema de los sindicatos", afirmó.

Azpilicueta criticó duramente la exigencia de los sindicatos al Gobierno de que retirara el documento de su propuesta para sentarse a negociar, lo que demuestra, a su juicio, la falta de disposición al diálogo. "Es una huelga de carácter político aprovechano una fecha emblemática para España, el fin de la presidencia española de la Unión Europea (UE)", concluyó.