En 1990 los impuestos crecieron más que el precio del crudo -----------------------------------------------------------

MADRID
SERVIMEDIA

Campsa aprobó hoy una subida de una peseta en los precios de las gasolinas "súper", "normal" y "sin plomo", situándolos en 88, 84 y 85 pesetas por litro, respectivamente, según informaron fuentes de lacompañía.

Los gasóleos de automoción se mantienen en el mismo precio de la última quincena (67,8 pesetas por litro), mientras que el de calefacción desciende 40 céntimos, pasando de 42 a 41,60 pesetas por litro, en el caso de suministros en estaciones de servicio, y de 39,2 a 38,8 pesetas para las entregas superiores a 3.500 litros.

Los precios de venta al público de las gasolinas se rigen por los máximos autorizados por el Gobierno una semana antes, que también regulan los ingresos de Hacienda pr ventas de hidrocarburos.

Según datos de la Delegación del Gobierno en Campsa, durante 1990 el coste medio del crudo importado durante 1990, incluyendo fletes y seguros, aumentó un 7,2 por ciento respecto a 1989, mientras que los ingresos del Tesoro por Impuestos Especiales, Renta de Petróleos e IVA del Monopolio crecieron un 8,7 por ciento.

Fuentes de Campsa indicaron a Servimedia que los nuevos precios confirman los pronósticos de los responsables de la compañía, que esperaban una evolución faorable de los combustibles en los seis países comunitarios de referencia durante la última semana, para evitar un aumento superior a una peseta.

La subida de las gasolinas anunciada hoy por Campsa responde a los incrementos de los precios máximos que autorizó el Gobierno la semana pasada, según el nuevo sistema fijado por Industria en julio de 1990.

VARIACION DE IMPUESTOS

Este sistema supone una revisión quincenal de los precios de los combustibles, sobre la evolución que hayan tenido dos semans antes en Gran Bretaña, Alemania, Italia, Francia, Bélgica y Luxemburgo, y teniendo en cuenta los precios medios del crudo en los mercados de Rotterdam y Génova.

Además, regula una revisión simultánea de los impuestos que Hacienda ingresa por las ventas de combustibles, ya que la fiscalidad sobre hidrocarburos se fija en función de los precios.

Según datos facilitados por la Delegación del Gobierno en Campsa, durante el año 1990, el coste medio del crudo importado, incluyendo su traslado y los sguros, se situó en 15.395 pesetas por tonelada, un 7,2 por ciento superior al de 1989, mientras que la presión fiscal aumentó un 8,7 por ciento.

Estas cifras indican que la fiscalidad ha crecido, en 1990, 1,5 puntos por encima de los precios de compra de los combustibles en el exterior.

(SERVIMEDIA)
08 Abr 1991
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