Según informa el sindicato ELA, el Ejecutivo que preside el socialista Patxi López ha anunciado a los sindicatos para 2012 una nueva congelación salarial y un pacto por el empleo que se circunscribe al mantenimiento de los actuales puestos de trabajo, pero supeditado a la aceptación de la revisión de los complementos de las bajas de enfermedad, la suspensión del contrato relevo y de las primas por jubilación anticipada, y la del pago de la carrera profesional durante el próximo año.

Esta ha sido la primera reunión de la Mesa General de la Función Pública del País Vasco, que tiene lugar tres días después de celebradas las elecciones generales.

Para ELA, el Gobierno vasco "vuelve a hacer un discurso en el que exigen a los agentes sociales y los trabajadores de lo público responsabilidad para que, ante la falta de recursos, asumamos los recortes como medida para salir de la crisis".

Denuncia los "incumplimientos" en las "cuatro materias claves" del acuerdo anterior (salarios, empleo, subcontratación y euskera), y manifiesta que estos "incumplimientos" y los planteamientos que ha realizado el Gobierno vasco en la Mesa "suponen un ataque a los servicios públicos, y vuelven a castigar a los trabajadores de los servicios públicos con nuevos recortes, criminalizando a los trabajadores en y suprimendo derechos, queriéndoles hacer responsables o paganos de una crisis que no han provocado".

Prosigie el sindicato lamentado que "nos parece indecente que se nos hable de responsabilidad cuando mantienen políticas absolutamente neoliberales que nos llevan a la destrucción de empleo y a precarizar los servicios públicos".