Minutos después de la apertura de las urnas, Urkullu votó en su colegio electoral de Durango (Vizcaya), donde animó a los electores a acudir a votar con el fin de decidir el futuro de Euskadi y cómo afrontar los retos a los que se enfrenta.

Respecto al hecho de que sean las primeras elecciones democráticas sin terrorismo, el líder nacionalista confió en "que sea para siempre, que podamos vivir en una sociedad donde vayamos construyendo poco a poco este camino de la paz y la convivencia, y felicitarnos por que Euskadi pueda vivir por primera vez una jornada (electoral) sin la amenaza del terrorismo y de la violencia".