20-N. Rajoy no usará el escándalo de Blanco en el debate salvo que Rubalcaba le ataque con la corrupción

MADRID
SERVIMEDIA

El líder del Partido Popular y candidato a la Presidencia del Gobierno, Mariano Rajoy, no utilizará durante el debate electoral de esta noche el presunto escándalo de corrupción del "caso Campeón", que ha salpicado al ministro de Fomento José Blanco, salvo que Alfredo Pérez Rubalcaba le ataque previamente con otros escándalos de corrupción.

Fuentes de la dirección nacional del PP aseguraron que Rajoy no tiene previsto ensuciar con este tema el cara a cara que va a mantener con el candidato del PSOE durante el debate que ha organizacido la Academia de Televisión y que será retransmitido este lunes en directo por la mayoría de las cadenas.

Rajoy tampoco tiene previsto utilizar la lucha antiterrorista como herramienta para atacar a Rubalcaba, sino que únicamente piensa hablar de la situación de la banda terrorista ETA para recalcar la posición que su partido ha mantenido en los últimos años y que pasa por exigir a los asesinos su disolución.

Las armas fuertes del candidato del PP serán la economía y las políticas sociales, los temas que considera que más interesan a los ciudadanos y sobre los que piensa enumerar las soluciones que ofrece su partido para salir de la actual crisis económica y financiera.

Para ello, Rajoy se ha pasado el fin de semana estudiando un gran número de datos a través de las fichas que le ha elaborado su equipo del Grupo Parlamentario Popular del Congreso, encabezado por Soraya Sáenz de Santamaría y José Luis Ayllón.

No obstante, algunas de las comunidades autónomas donde gobierna el PP también han suministrado fichas a Rajoy con datos sobre los recortes que se han llevado a cabo en los últimos meses. El líder popular es consciente de que Rubalcaba va a utilizar este asunto en su contra y que le reprochará los ajustes realizados en Madrid y Castilla-La Mancha, entre otros sitios. Por eso, también ha estudiado la situación de estas comunidades para saber defenderse.

Rajoy es consciente de que se juega poco en este debate, ya que el PP cree que, pase lo que pase, el resultado apenas cambiará el voto de un 1 o 2% del electorado.

Además, piensa que Rubalcaba se juega mucho más dado que está muy por detrás en las encuestas, lo que hace pensar en la sede de la calle Génova que el candidato del PSOE intentará sacarse algún conejo de la chistera.

En el PP dicen que Rajoy va preparado para cualquier cosa, pero sobre todo para no perder los nervios ante Rubalcaba y para mantener el hilo argumental que ha ensayado durante los últimos días. Para ello, ha contado con la ayuda de un "sparring" con el que fogearse, como en el boxeo, a modo de entrenamiento.

En los dos debates electorales del año 2008, Rajoy contó en esa tarea con la ayuda de Pedro Arriola, su sociólogo de cabecera. Esta vez, en el PP no aclaran quién ha sido el "sparring" del candidato popular, pero reconocen que Rajoy se ha pasado toda la mañana encerrado en su casa con Arriola para ultimar los preparativos del cara a cara con Rubalcaba.

Rajoy también ha cuidado todos los detalles de imagen para el debate. Ha decidido vertir un traje gris y una corbata azul o roja, quizá la misma que ya utilizó en 2008 y que dijo traerle suerte desde el programa de televisión "Tengo una pregunta para usted". Además, acudirá acompañado por la directora de la campaña y vicesecretaria general de Organización del PP, Ana Mato; el vicesecretario general de Comunicación, Esteban González Pons; la directora de Comunicación del PP, Carmen Martínez Castro; el sociólogo Pedro Arriola; y Ramón Iribarren, amigo personal de los tiempos de juventud y que ya escoltó a Rajoy en los dos debates televisados de 2008.

(SERVIMEDIA)
07 Nov 2011
PAI/man