Fuentes populares manifestaron a Servimedia que Casado logró un “bombazo” en la imagen del coso taurino de la capital levantina, donde 9.500 personas abarrotaron la plaza y otras mil se quedaron fuera sin poder entrar por las limitaciones de Covid-19 y las normas de seguridad.

Los dirigentes del PP consultados por esta agencia reconocieron marcharse de Valencia con un “subidón” por haber vuelto a llenar este mítico escenario, cosa que no ocurría desde las elecciones generales de 2016 y que siempre fue preludio de victorias electorales para los populares.

De hecho, uno de los exministros del PP comparó lo conseguido por Casado en Valencia con lo ocurrido hace justo diez años, cuando Mariano Rajoy reventó la Plaza de Toros de la ciudad del Turia en la campaña de las elecciones generales que le abrieron las puertas de La Moncloa. La diferencia para el partido de la calle Génova 13 es que ahora quedan dos años para afrontar otros comicios de ese tipo y, por lo tanto, Casado tiene que consolidar y mantener la alternativa que visualizó este domingo.

Además, los populares se marcharon de Valencia muy satisfechos porque la Convención Nacional celebrada esta semana ha servido para “cerrar” la crisis interna que había abierto la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, al postularse para presidir el partido a nivel regional varios meses antes de que se convoque.

Su insistencia tras el triunfo en los comicios autonómicos del pasado 4 de mayo habían despertado multitud de suspicacias dentro del partido durante las últimas semanas y también en los medios de comunicación, hasta el punto de llegar a especular que tuviera la ambición futura de sustituir a Casado al frente del PP.

El mensaje que la propia Ayuso lanzó el sábado en la Convención Nacional ante Casado y el resto de los barones territoriales frenó esa posibilidad al asegurar que es consciente de que su “sitio” está “en Madrid” y que desde la Presidencia de la Comunidad quiere ayudar a llegar a La Moncloa a su amigo personal desde la juventud y actual presidente del partido.

Tanto en la dirección nacional como en el equipo de Ayuso consideran que esta crisis está “cerrada” por lo “explícita” que fue la presidenta madrileña al expresar públicamente su apoyo a Casado. Las fuentes consultadas indicaron a Servimedia que en los días o semanas previas también había trasladado en privado ese mismo respaldo a Casado para que él no tuviera duda de sus pretensiones, aunque mientras tanto hayan continuado los reproches soterrados entre personas de la máxima confianza de ambos.

Desde la Comunidad de Madrid recalcaron a Servimedia que Ayuso “no puede hacer más” para manifestar su apoyo “total” a Casado y recordaron que ambos mantienen una estrecha amistad desde jóvenes, motivo clave para que el líder del PP la escogiera por sorpresa cuando se convocaron las elecciones autonómicas de 2019.

Los entornos de ambos expresaron a Servimedia que aquella confianza sigue vigente entre Casado y Ayuso, aunque quede difuminada en ocasiones por la batalla soterrada que mantienen otras personas de sus equipos y que no han desaparecido tras el mensaje del sábado en la Convención. De hecho, algunos dirigentes desconfían y piensan que Ayuso puede generar otro lío “mañana mismo” o permitir, al menos, que lo hagan desde su gabinete. Por el contrario, en el PP de Madrid son conscientes de que en los círculos más estrechos a Casado sigue habiendo gente que no confía en Ayuso y que los ataques contra ella proceden de ahí.