Religión

La Conferencia Episcopal llama a los católicos a “no doblegarse” y reconocer su fe frente a las modas sociales

MADRID
SERVIMEDIA

El presidente de la Conferencia Episcopal Española (CEE), cardenal Juan José Omella, pidió este jueves a los católicos “no doblegarse a la moda” y “decir con normalidad lo que uno piensa y lo que uno vive”. “A veces nos da vergüenza” reconocer la fe, lamentó.

Así lo dijo con motivo de la presentación de un documento para el trabajo de los órganos episcopales para los próximos cuatro años que tuvo lugar en la sede de la CEE en Madrid.

Omella comparó la situación con una casa grande de pueblo abandonada pero que hay que restaurar. “No hay que estar diciendo qué mal esta casa se hunde sino cómo la arreglamos”, aseveró. “Evangelizar nunca ha sido fácil”, reconoció, pero puso de ejemplo los primeros cristianos a los que evangelizaron los misioneros en el corazón de África.

Durante la presentación del documento, el secretario general de la CEE y portavoz del Episcopado, Luis Argüello, aseguró que este plan de trabajo se ha basado en “un ejercicio de diálogo de ida y vuelta de casi dos años”.
El documento trata de proponer vías de trabajo ante los “cambios tan acelerados que apuntan a un cambio de época” con una mirada en la que no pueden “arrancar una convicción”: “que creemos en Dios”.

RECONCILIACIÓN

“Miramos con preocupación y benevolencia a una sociedad que vive como si Dios no existiera”, en un ambiente de “gran desvinculación” donde se da “el triunfo de las ideologías sobre la realidad”, la “autodeterminación del propio cuerpo”, del otro y “del mismo Dios”.

“Es una desvinculación que crea desconfianza y luego enfrentamiento”, añadió, para lo que recordó la reciente llamada que hizo el Papa en una entrevista a la Cadena Cope, donde llamó a la reconciliación en España.

Argüello también se refirió a la “confusión antropológica” que los prelados detectan en el “nuevo neocapitalismo global” y que repercute, entre otras cosas, en cómo se expresa “con especial virulencia”, en la compresión de la familia. En resumen, el documento propone “salir a la plaza pública” con la evangelización y “romper con la mundanidad”.

Según el secretario general de los obispos, la propuesta que ofrece la Iglesia es “integral”, de economía, sistema político, de comprensión antropológica, de la familia, “vinculada al amor y a la transmisión de la vida” en estos momentos de invierno demográfico.

Frente al proyecto “desfamiliarizador” que toma peso en la sociedad, los obispos reconocen que “las búsquedas permanentes del corazón humano, de todo tipo, incluso las que nos parecen que están en la acera de enfrente de nuestra propuesta hablan de su insaciable inquietud”. "Todos queremos la solución del dolor y de la muerte, aunque a veces se busque la solución del dolor por el camino extraviado de aniquilar al que sufre”, añadió.

“Cada uno de esos nuevos pretendidos nuevos derechos que tantas veces nos parecen rechazables hunden sus raíces en el tejido más profundo de cada existencia humana. Por eso tienen atractivo. Por eso tantos chavales, adolescentes y jóvenes se sienten atraídos por las propuestas del nuevo progresismo cultural”, argumentó. “¡Qué desafío tenemos, hermanos!”, subrayó.

"Desgraciadamente hoy la propuesta cultural dominante que se ha hecho en nuestro Parlamento, con propuestas legislativas, cree que incluso esta propuesta de diálogo lleva consigo comportamientos fóbicos, cuando es todo lo contrario. Amar a la persona en la verdad de lo que es, en la verdad de su diversidad no sólo no es fobia, sino que es la fuente misma de una acogida amorosa”, justificó.

Los abusos y la manera de administrar los bienes fueron otros de los asuntos que se recogen en el documento, que llama a trabajar en comunión, “con proyectos evangelizadores y no por departamentos separados”.

(SERVIMEDIA)
09 Sep 2021
AHP/pai